Amigos para siempre

A esta "cierta edad" que disfrutamos, buscamos más que nunca el calor de la amistad. A "esta cierta edad", somos ya expertos en el tema y sabemos que la Amistad con mayúscula es posible y que la amistad con minúscula es necesaria.

Seguramente todos hemos tenido o tenemos la suerte de compartir sinceramente con un Amigo o Amiga nuestras inquietudes, problemas, banalidades; de sentirnos escuchados, comprendidos, queridos; de reírnos y de llorar en la misma onda...

Cosa grande la Amistad. Pero es difícil encontrarla y, más aún, conservarla porque los egoísmos, las prioridades, los intereses, la desconfianza, el cansancio... van encogiendo nuestro corazón hasta dejarlo tan pequeño que apenas caben dos o tres cariños . Y cuando esto le ocurre a una de las partes implicadas, la otra ya no cabe...
¿Es que exigimos demasiado, es que con el tiempo se desgasta irremediablemente, es que corremos detrás de un espejismo...?

Sin embargo, los humanos necesitamos relacionarnos para mantener "la llama" viva.

Siempre podemos practicar el patinaje social sobre hielo, una especie de "trato" superficial, encantador, que no compromete, no nos hace ni gozar ni sufrir en profundidad y "queda ideal". Aunque, si piensas que la Amistad es solo eso, puede que parte de ti se congele sin que te des cuenta...

Pero una es romántica y está convencida de que las utopías se pueden hacer realidad. Creo en la Amistad para toda la vida y creo que hay muchas personas capaces de ofrecerla y mantenerla. Aun si se acaba, habrá merecido la pena.
No mezclemos el amor en esto pero, como en el amor, hay que encontrarse, y que la chispa surja. Nunca es tarde. ¡Suerte!