Truco de la abuela para apagar el fuego de una sartén

Estás cocinando, una gota de grasa entra en contacto con el fuego y la sartén se incendia. ¿Qué hacer? Es momento de actuar con rapidez  y, sobre todo, correctamente para apagar el fuego de la sartén. Te contamos qué puedes hacer y qué debes evitar para no avivar el fuego y entrar en una situación de riesgo.

Los incendios que se inician en la cocina son frecuentes. Basta un descuido o una mala gestión cuando salta una llama para provocar una situación delicada. Aunque parezca obvio, una de las cosas más básicas que hemos de tener en cuenta para evitar un incendio es prestar atención constante a lo que estamos cocinando y no dejar el fuego desatendido en ingún momento.  Pero, si aun estando pendientes, salta una llama, te explicamos detenidamente este truco de la abuela para apagar el fuego de una sartén.

¿Cómo se inicia el fuego en una sartén?

El fuego en una sartén se producen cuando el aceite o la grasa presente en el interior se calienta demasiado. Cuando ese aceite aumenta a una temperatura muy alta, por ejemplo, a más de 280 grados centígrados, se incendia. Teniendo en cuenta que las placas de vitrocerámica pueden alcanzar temperaturas de hasta 400 grados centígrados, es importante vigilar siempre que cocinemos con aceite.

Pero si cocinamos con gas y el aceite dentro de la sartén está saltando, por ejemplo, al cocinar un filete o unas patatas, esas gotitas de grasa que saltan, al entrar en contacto con el fuego, pueden llevarlo hasta el interior provocando que se incendie.

Por lo tanto, la prevención cuando cocinemos es fundamental. Debemos seguir estas dos pautas:

- No poner la temperatura de la placa o el fogón demasiado caliente.

- No dejar sin vigilancia la sartén.

Lo que nunca debes hacer para apagar el fuego de una sartén

La regla más importante que debemos tener en cuenta: nunca intentes extinguir el fuego con agua. ¿Por qué?

Las temperaturas de una sartén puede subir rápidamente a unos 300 °C. Si tenemos en cuenta que el agua se evapora a 100 °C y ese vapor de agua tiene más volumen que el agua líquida, se produce fácilmente una explosión repentina que provoca una llama. Por lo tanto, el agua, en lugar de apagar el fuego de una sartén, como podría pensarse, puede avivarlo si la temperatura es muy alta. 

Cómo apagar el fuego de una sartén

La extinción del fuego de una sartén se debe basar en el principio de sofocar el fuego, es decir, dejarle sin oxígeno para evitar que se expanda. Esto es lo que hacemos cuando, por ejemplo, ponemos un vaso en una vela. Al quedarse sin oxígeno, el fuego de la mecha se consume.

En el caso de una sartén, utilizar una tapadera es la mejor forma de apagar el fuego que pueda haberse iniciado. La tapadera logrará que el fuego que contiene el interior de la sartén se quede sin oxígeno y, por lo tanto, se sofoque.

En caso de que el fuego de la sartén haya pasado rápidamente a los muebles, la cortina u otros elementos y no seas capaz de controlarlo, lo más importante es salir cuanto antes de la vivienda. Para ello: 

- No intentes salvar elementos, cierra la puerta de la cocina y sal cuanto antes. 

- Ve cerrando las puertas tras de ti si las hay mientras te diriges a la salida.

- Si hay mucho humo, tírate al suelo y arrástrate, idealmente con un paño húmedo sobre la boca.

- Pide ayuda en cuanto te sea posible.