Adaptación al entorno: ciudades accesibles

Cómo definimos una ciudad accesible

Ciudad accesible es la que permite que todas las personas puedan vivir, desplazarse y participar en la vida de la ciudad, independientemente de que manifiesten una discapacidad permanente o temporal. Debe existir igualdad de oportunidades para que toda la ciudadanía pueda disfrutar de los espacios públicos, de los transportes, de los servicios, infraestructuras e instalaciones públicas y de la comunicación, independientemente de su situación.

Las personas afectadas por limitaciones a la accesibilidad pueden padecer alguna discapacidad permanente, o ser ancianos, niños, embarazadas, personas con carritos o sufrir una situación de limitación temporal de la movilidad o de los sentidos. 

Hoy es un objetivo prioritario el transformar las ciudades para evitar las barreras. Ciudades que fueron creadas con otras prioridades y que ahora se deben transformar puesto que siete de cada diez personas con discapacidad viven en entornos urbanos.

Desde las distintas administraciones y corporaciones locales se han ido implementando normativas, ayudas y medidas para llevar a cabo este objetivo, en algunos casos arduo y difícil, pero no por ello imposible. 

Qué problemas se pueden encontrar las personas con discapacidad

Las barreras son diversas dependiendo del tipo de discapacidad.

La accesibilidad de una ciudad no se limita a la eliminación de barreras físicas, sino que va mucho más allá, puesto que incluye la accesibilidad comunicativa, la accesibilidad cognitiva, la accesibilidad cultural... Toda la ciudadanía debe tener igualdad de oportunidades y poder participar con la máxima autonomía.

Una persona con discapacidad se puede encontrar:

-Dificultades en la detección de obstáculos y elementos de riesgo, por problemas de orientación en el espacio o por discapacidad visual. Las que limitan la posibilidad de acceder a los espacios y moverse en ellos.

-Dificultades de maniobra

-Dificultades para salvar desniveles

-Dificultades de control

-Dificultades de alcance, aquellas derivadas de llegar a los objetos con las manos

-Dificultades de percepción y comunicación. Las que se derivan de la limitación de percibir imágenes, escuchar sonidos, entender y trasmitir mensajes.

Qué medidas hacen a una ciudad accesible

Las ciudades accesibles incorporan mejoras, como encaminamientos, semáforos acústicos y mapas táctiles para personas ciegas, lavabos públicos adaptados, parques para niños con movilidad reducida, avisos luminosos para personas sordas, ascensores o escaleras mecánicas para salvar pendientes, cartelería en lectura fácil, máquinas expendedoras y cajeros para todos, aplicaciones de ayuda para moverse por la ciudad... En la mayoría de los  casos son pequeñas medidas que no necesitan de muchos recursos económicos, sino simplemente voluntad de cambio.

La accesibilidad urbanística es quizá la más extendida y sobre la que más se trabaja, nadie pone en duda la utilización de medidas como:

-Bordillos rebajados en los cruces de calzadas

-Baldosas podotáctiles para señalizar y  encaminar los recorridos

-Rampas para salvar desniveles

-Anchos mínimos de aceras

-Escaleras mecánicas y ascensores en ciudades con muchos desniveles

No obstante, a veces se olvidan otros detalles menores pero que se convierten en obstáculos, como la colocación de bolardos, la mala ubicación de señales de tráfico y mobiliario urbano, papeleras, bancos, carteles anunciadores, ya que todos ellos pueden dificultar el tránsito.   

El buen mantenimiento de los espacios públicos es fundamental también para evitar encontrarse con "accidentes urbanos", baldosas levantadas, alcorques sin protección, socavones en las calzadas, arboles rotos...  

Es fundamental que cualquier ciudad que se precie de desarrollar actuaciones de accesibilidad incorpore dentro de las mismas la cultura del mantenimiento permanente de los espacios urbanos.

Qué ciudades de España son más accesibles

Para valorar el esfuerzo de las ciudades en su transformación, desde distintos organismos nacionales e internacionales se otorgan diferentes premios y menciones para fomentar y valorar el esfuerzo que hacen los consistorios.

Uno de ellos, la Comisión Europea, en colaboración con el Foro Europeo de la Discapacidad, entrega cada año el Premio Ciudad Accesible a cuatro ciudades que destaquen por el trabajo que realizan para favorecer la accesibilidad y la movilidad en sus calles. Entre los criterios para escoger a los ganadores se tienen en cuenta sus edificios y calles, el transporte público, las máquinas expendedoras y cajeros, páginas web y otras tecnologías que sean utilizadas para comunicarse, y las informaciones que sean fáciles de leer y comprender para todas las personas.

Algunas de las ciudades españolas han conseguido esta mención o han sido seleccionadas. A continuación, una reseña de las 10 ciudades más accesibles de España:

Ávila

Premio Ciudad Accesible 2011, ha sido la primera ciudad española en obtener el reconocimiento europeo. Dispone de un centro de visitantes que ofrece información sobre las rutas más accesibles, así como sillas de ruedas disponibles para los visitantes y plazas de aparcamientos para personas con movilidad reducida. La  muralla cuenta con una sección a la que puede accederse mediante una rampa, y también tienen una maqueta del monumento con información en braille.

Lugo

La ciudad gallega obtuvo una mención especial en los Premios a la Ciudad Accesible 2017, con motivo de su apuesta por las smart cities, aplicando las nuevas tecnologías en las iniciativas que fomentaban la accesibilidad de sus calles y monumentos.

Logroño

Recibió el Premio Reina Sofía de Accesibilidad Universal de Municipios, y también acogió las Jornadas Europeas de Accesibilidad en los Municipios 'Diseñando ciudades y pueblos para todas las personas' en 2014, que buscaba mejorar la calidad y la igualdad de oportunidades de las personas gracias a la accesibilidad de sus ciudades.

Málaga

Fue finalista del premio Ciudad Accesible 2014 gracias a su iniciativa "Málaga ciudad accesible", que busca convertir el entorno urbano en una zona accesible tanto para personas con discapacidades como para familias, además de apostar por itinerarios turísticos y áreas de descanso adaptadas a todos.

Tarrasa

Este municipio destaca por su apuesta por facilitar la accesibilidad de su centro histórico, eliminando barreras que impedían el acceso a personas en silla de ruedas mediante la instalación de puentes, ascensores y rampas. Por ello, obtuvo una mención especial en el Premio Ciudad Accesible 2012.

Santander

Quedó finalista en los premios Ciudad Accesible 2012, en los que se destacaron sus programas de accesibilidad urbana, enfocados a la calidad y sostenibilidad, entre los que se encuentra la eliminación de barreras en las calles y la implantación de un sistema de señalética destinado a personas con discapacidad visual.

Burgos

La ciudad fue finalista del Premio Ciudad Accesible 2014 gracias a su plan de accesibilidad, que cuenta con medidas destinadas a la mejora del entorno urbano, de la movilidad y de la comunicación al alcance de todos.

Barcelona

Quedó finalista en los Premios Ciudad Accesible 2011. En la actualidad, trabaja el segundo plan de accesibilidad universal, 2018-2026, para garantizar la accesibilidad universal de todas las personas a la ciudad.

Pamplona

Obtuvo una mención especial en los Premios Ciudad Accesible 2013 por las facilidades que ofrece la ciudad tanto en su entorno urbano como en términos de accesibilidad a los edificios.

Bilbao

Esta ciudad destaca porque apuesta por la información y la comunicación accesible para todas las personas, así como por incluir las nuevas tecnologías para incorporar esas facilidades, iniciativa con la que consiguió una  mención especial en los Premios Ciudad Accesible 2013.

Otros municipios que han sido reconocidos por su accesibilidad han sido Sabiñánigo (Huesca), que cuenta con un Plan de Movilidad Urbana Sostenible que busca eliminar las barreras arquitectónicas en los edificios públicos y las calles en general; Carreño, un municipio asturiano cuyo plan de accesibilidad se centra en la integración tanto laboral como social, la aplicación de nuevas tecnologías y la apuesta por medios que permitan la autonomía de las personas con discapacidad.

La accesibilidad, tarea de todos

La accesibilidad es una tarea importante y prioritaria para la trasformación de las ciudades y tiene que ser un objetivo indiscutible en el diseño de los nuevos crecimientos. Pero también requiere de una sensibilidad social global, de nada sirve el diseñar recorridos accesibles si luego se llenan de obstáculos dispuestos por otros ciudadanos insensibles, llámese patinetes, motos, coches mal aparcados, mesas y sillas de los bares..., objetos que invaden los recorridos. Es tarea de todos el hacer las ciudades accesibles porque cualquiera de nosotros podemos llegar a ser discapacitado.

Hagamos la prueba de cerrar los ojos  y los oídos y movernos por nuestra ciudad, a ver qué pasaría...

Pilar García Corredor
Arquitecta-Urbanista