Fraudes a personas mayores: cómo evitarlos

Muchas veces no saben escapar a una publicidad muy agresiva ni rechazar una información poco clara. Consumadrid repasa los fraudes más habituales de los que son víctimas las personas mayores y nos ofrece las claves para evitarlos.

VEAMOS ALGUNOS EJEMPLOS:
Voy de excursión y me ofrecen la posibilidad de comprar algún producto especial:

•   No se deje condicionar por las promociones agresivas o por una situación incómoda (estar mucho tiempo en una sala escuchando una charla, por ejemplo). Piénselo bien antes de firmar la compra.

•   Si adquiere finalmente el producto, es obligatorio que le den un documento de revocación, que le permite dar marcha atrás en la compra en un plazo de 7 días desde la recepción del producto en su domicilio. Si decide ejercer este derecho, deben retirar el producto sin coste alguno para usted. Si no le facilitan este documento, puede reclamar en la Dirección General de Consumo.

•   Las características del producto que reciba en su casa deben coincidir con lo que le explicó el comercial en la charla. Si no es así, puede reclamar, porque se trataría de publicidad engañosa.

Contrato un viaje:

• Sea el tipo de viaje que sea, usted tiene los mismos derechos que cualquier viajero. No piense que por ser más barato o subvencionado, tiene que conformarse con algo que no se ajusta a lo que le han ofrecido. Si lo que le han ofertado por escrito (por ejemplo, en el folleto) no coincide con lo que se encuentra en el destino, tiene derecho a reclamar.

• Si, por ejemplo, le han ofrecido una habitación con vistas al mar y no las tiene, usted debe exigir al hotel que se la den. Si no la tuviesen, le deben ofrecer o bien una habitación de categoría superior o bien la devolución de parte del pago.

• Si usted contrata habitualmente su viaje a través de su centro de mayores y no ha quedado satisfecho con el servicio ofrecido por la agencia de viajes, tiene derecho a acordar con el centro un cambio de agencia.

• Si, después de su viaje, usted está disconforme con algo, puede poner una reclamación en la Dirección General de Consumo, en alguna oficina de información al consumidor o en la Dirección General de Turismo.

Me dejo llevar por la publicidad:

• Sea muy precavido con los anuncios: en ocasiones no es todo como se cuenta. Productos que parecen especialmente destinados a personas de la tercera edad -por ser más saludables, más baratos, etc.-, en realidad son artículos para el público en general, ni son mejores para su salud ni más baratos para usted.

• Los productos que usted compra a través de la televisión pueden ser devueltos si no se ajustan a lo que quería. Es muy importante que se fije bien en el período que tiene para realizar esa devolución.

• Tenga cuidado con los productos alimenticios que se anuncian en televisión. Pueden parecerle muy convenientes para sus comidas, pero a lo mejor contienen algún ingrediente que no le favorece, como la sal. Es fundamental que, a la hora de comprar un alimento, lea bien los ingredientes que lleva.

Voy a contratar un servicio de telefonía:

• No se deje llevar por la amabilidad del comercial que llama a su puerta. Asegúrese bien de lo que está contratando, antes de hacerlo.
  
  
• Infórmese bien de las condiciones, tarifas, impuestos, etc. antes de contratar un servicio.

• Piense con detenimiento si realmente necesita lo que le están ofreciendo, o si, con el servicio que ya tiene, le es suficiente.

• Si le proponen cambiar de compañía a través de una conversación telefónica, asegúrese bien de lo que le están preguntando, aunque tenga que preguntarlo varias veces. En ocasiones un "sí" a una pregunta poco clara, es tomado por la empresa como la aceptación de ese cambio de compañía.

• Solicite siempre copia del contrato del servicio que haya suscrito. Durante los primeros siete días después de la contratación, se puede rescindir el contrato sin coste alguno.

Me anuncian una revisión del gas:

• Asegúrese siempre de que el técnico que acude a su domicilio está en posesión del carné oficial.

• No deje entrar nunca a nadie para hacer una revisión de su instalación si su empresa suministradora no le ha avisado de que iba a enviar un técnico o si usted no ha llamado para esa revisión.

He pensado reformar mi casa:

• Es recomendable pedir siempre factura de la reforma, aunque ello implique que le cobran el IVA. La factura es la única garantía que va a tener si tiene que reclamar después por el trabajo que le han realizado.

Voy a contratar un seguro:

• Lea detenidamente la letra pequeña y, si no entiende bien lo que pone, asesórese en alguna oficina de información al consumidor. Así evitará llevarse sorpresas, pensando que tiene contratado algo que en realidad no consta.

Tengo un seguro de defunción:

• Cada vez con más frecuencia ocurre que, después de estar pagando durante varios años una póliza, llega un día que la empresa le avisa de que le tiene que subir el importe (a veces el doble o más) y, si no lo acepta, usted puede perder todo lo que ha estado aportando. Lea bien el contrato que tiene firmado y sepa que, si la compañía trata de cambiarle unilateralmente las condiciones de ese contrato, usted tiene derecho a reclamar ante los tribunales de justicia rescindiendo el contrato y pidiendo una indemnización.

En relación a los suministros de su hogar:

• Es conveniente también revisar los contratos de tanto en tanto. Por ejemplo, puede ocurrir que esté pagando más servicio del que necesita. Un caso habitual es que cuando los hijos se independizan las necesidades de suministro eléctrico para usted sean menores.