Las razones por las que 2021 será mejor que 2020

Una vez más, la ciencia nos sacará de esta. Ya está aquí la vacuna contra la COVID-19, un verdadero milagro teniendo en cuenta que el tiempo habitual de desarrollo de una vacuna es de entre 5 y 10 años. Pero la del coronavirus apenas ha tardado 10 meses y, sin duda, supone el principio del fin de la horrible situación que nos ha tocado vivir.

Por supuesto, muchos son los condicionantes de los que dependen que este año vaya mejor o peor, pero los expertos son optimistas y auguran un año muy diferente al que acabamos de vivir. 

"Ante las positivas noticias sobre la eficacia de las vacunas, ya podemos ver la luz al final del túnel. Llegar a la salida podría ser cuestión de meses, según la rapidez con la que se puedan producir y distribuir los tratamientos", afirma Karen Ward, estratega jefe de JP Morgan AM. La gestora estadounidense cree que la falta de crecimiento seguirá siendo la tónica en el primer trimestre del año y, posiblemente, en el segundo, pero que "a partir del verano, podría registrarse un repunte importante de la actividad, después de que se hayan facilitado las vacunas, se libere la demanda acumulada y la vida comience a recuperar la normalidad", añade.

Razones de salud... y, cómo no, de dinero. "La política monetaria llevada a cabo hasta ahora se mantendrá en términos ultraexpansivos y respaldará una provisión de liquidez que garantice que los recursos financieros sean suficientes para satisfacer las necesidades de la actividad productiva y del endeudamiento público, minimizando a su vez el riesgo de insolvencia", apuntan desde el Instituto de Estudios Económicos.

Por otra pare, la empresa multinacional británica de gestión de activos Shroders añade que "Los fondos para la recuperación llegarán en 2021, con especial atención al programa Next Generation, dotado con 750.000 millones de euros. Está diseñado para construir una Europa más verde, más digital y más resistente. Además hay un importante estímulo fiscal de los Gobiernos y la política monetaria flexible del BCE también debe contribuir a la recuperación".

Unos y otros nos dan motivos para ser optimistas. Aunque eso sí, todos ellos están de acuerdo en que la recuperación se hará efectiva poco a poco y que será muy desigual, según el nivel de riqueza.