Los 10 apellidos más comunes en Asturias y su significado

Los 10 apellidos más comunes en Asturias y su significado

Nuestro apellido dice más de nosotros de lo que podamos pensar. Su origen puede indicarnos de dónde provenimos. En esta ocasión queremos conocer cuáles son los apellidos más comunes en Asturias y cuáles son sus significados.

Los apellidos son más que meras etiquetas, son piezas vivas de la historia que llevamos con nosotros. Los apellidos asturianos cuentan una historia fascinante de migraciones, oficios y la fusión de diferentes culturas. Asturias ha sido testigo de una historia rica y compleja que se refleja en los apellidos que sus habitantes llevan con orgullo.

El nombre Asturias, proviene de los astures, un antiguo pueblo celta que habitaba en estas tierras. Muchos apellidos asturianos tienen sus raíces en esta época ancestral. Apellidos como "Fernández" (hijo de Fernando), "Álvarez" (hijo de Álvaro), "González" (hijo de Gonzalo), entre otros, encuentran sus orígenes en los nombres personales de la época. Estos apellidos se han transmitido a lo largo de generaciones, llevando consigo la esencia de los antepasados astures.

En conmishijos.com te mostramos cuáles son los apellidos más comunes en Asturias.

Apellidos más tradicionales de Asturias

García: Este es uno de los apellidos más comunes en España y en Asturias en particular. Se deriva del nombre germánico "García", que significa "oso valiente" o "líder valiente". García es un antropónimo muy antiguo, de origen prerromano. Fue un apellido utilizado por nobles y guerreros, lo que puede explicar su amplia distribución. El apellido García fue frecuente entre los conquistadores de América. Según datos de 2021 del INE, es el apellido más común en España, lo llevan como primer apellido 1.455.085 de personas.

Fernández: El segundo apellido más común en Asturias. Proviene del nombre personal "Fernando" o "Ferdinando", que tiene origen germánico y significa "viajero audaz" o "valiente en el viaje". En realidad, se llamaba "Fernández" a los hijos de los llamados Fernando.  La mayoría de los apellidos españoles procedentes de nombres germánicos fueron introducidos en España durante los siglos V-VII por los visigodos. Según datos del 2016 del INE, es el cuarto apellido más extendido en España.

Rodríguez: Es un apellido patronímico español, originario del Norte de la península ibérica, donde es el segundo apellido más frecuente. La terminación "ez" significa "hijo de", por tanto, Rodríguez es "hijo de Rodrigo". El significado del apellido sería "hijo de Rodrigo" o "hijo del rey famoso". El origen del apellido se remonta a la Edad Media, probablemente anterior al siglo XI. En 2020, era el segundo apellido más común entre los españoles, 930.659 habitantes lo tenían como primer apellido.

Álvarez: Otro de los apellidos más comunes en Asturias. Deriva del nombre propio "Álvaro" o "Albar", de origen germánico. Su significado puede relacionarse con "todo guardián" o "defensor de todo". Su nombre tiene varias ramas, por este motivo no existe un origen único de este apellido. La rama más antigua es la de Asturias, posteriormente están los Álvarez de León que provienen de los anteriores. Es el 26º apellido hispano más común.

González: Es un apellido patronímico español. Proviene del nombre "Gonzalo", que tiene raíces germánicas y significa "lucha valiente". González, al igual que muchos otros patronímicos españoles como Gómez, Rodríguez, Fernández, o López, está ampliamente extendido tanto en España y en Hispanoamérica como consecuencia de la colonización. Pero, también es posible encontrarlo en las antiguas colonias españolas de Filipinas y Guinea Ecuatorial. En 2021, en España era el tercer apellido más habitual con 924.321 personas.

López: Entre los apellidos más frecuentes de Asturias encontramos López. Antiguamente se le atribuía un origen romano, cuyo significado era "gobernador", pero en la actualidad los estudios históricos concluyeron que el patronímico de Lope unido con el sufijo "ez" significa "Hijo de Lobos". Puede haber sido utilizado como un sobrenombre relacionado con características personales o geográficas. Según datos del INE, de 2016, es el quinto apellido más extendido en España.

Suárez: Este apellido deriva del nombre "Suero", bastante utilizado en la edad Media, que a su vez se relaciona con "alma" o "vida", y puede haber sido utilizado como un nombre que evoca protección o vida. En cuanto al origen de este Suero tampoco hay unanimidad: hay quienes apuntan a un origen latín "Suerius", como variante de «sutor» "el que cose" o el "zapatero", pero también se han propuesto orígenes germánicos, celtas o vascos.

Martínez: Es un apellido patronímico que significa "hijo de Martín". El nombre "Martín" tiene raíces latinas y significa "dedicado a Marte", el dios romano de la guerra. Martín por tanto es la derivación románico-francesa del latín "Martinus", se piensa que podría ser un nombre otorgado a soldados de Roma, o por el contrario, eran éstos quienes usaban el término para los pobladores más conflictivos de los territorios dominados. Según datos de 2021 del INE, es el sexto apellido más extendido entre los españoles.

Pérez: Tiene su origen en la Edad Media, cuando se produjo la transición entre el nombre "Petrus" y su derivación en "Pere", más tarde "Pérez". Es un apellido patronímico que significa "hijo de Pedro". El nombre "Pedro" proviene del griego "Petros", que significa "roca" o "piedra". Está documentado ya en el siglo XII. Es uno de los 100 apellidos españoles más frecuentes.

Menéndez: Este es décimo apellido más común en Asturias. Patronímico de Menendo, diminutivo de Ermendo, Hermenegildo o Airmanagild, nombre de origen germánico que significa "el valor del ganado" o "el que vale por su ganado". Con el sufijo ez: "hijo de", muy común en los patronímicos españoles.

Estos son los 10 apellidos asturianos más comunes y sus posibles significados. Cabe destacar que los significados pueden variar según las fuentes y las interpretaciones lingüísticas. La riqueza de los apellidos asturianos refleja la diversidad histórica y cultural de la región. Con el tiempo, la evolución del idioma y las dinámicas sociales llevaron a cambios en la pronunciación y la escritura de los apellidos. Algunos apellidos se simplificaron o alteraron con el paso de las generaciones. Esto hace que rastrear la historia de un apellido específico a menudo sea un desafío emocionante y fascinante para los genealogistas y los amantes de la historia.

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