Edadismo, cómo afecta esta discriminación a las personas mayores

El edadismo es una forma de discriminación basada en la edad que, aunque lleva existiendo siglos, apenas está comenzando a ser reconocida como un problema social y de salud pública. Este fenómeno tiene un impacto significativo, especialmente en las personas mayores, limitando su participación en la sociedad, afectando su salud física y mental, e influyendo incluso en su esperanza de vida. Sin embargo, el edadismo también afecta a los más jóvenes, creando barreras en su desarrollo personal y profesional.

¿Qué es el edadismo y por qué es tan perjudicial?

El término edadismo fue acuñado en los años 60 en Estados Unidos, pero no fue hasta 2022 cuando se incorporó al diccionario de la Real Academia Española. Este concepto se refiere a la manera en que pensamos, sentimos y actuamos hacia las personas o hacia nosotros mismos en función de la edad. El edadismo está profundamente arraigado en la sociedad y tiene efectos dañinos tanto individuales como colectivos.

El edadismo opera en tres niveles principales:

1. Estereotipos: Ideas preconcebidas sobre la edad, como asumir que las personas mayores son lentas, dependientes o poco adaptadas a las tecnologías.
2. Prejuicios: Emociones negativas basadas en estos estereotipos, como la incomodidad o la lástima hacia las personas mayores.
3. Discriminación: Comportamientos que excluyen o limitan a las personas debido a su edad.

El impacto del edadismo es devastador. Estudios realizados en Estados Unidos han demostrado que las personas con una percepción positiva del envejecimiento viven, en promedio, 7,5 años más que aquellas con una percepción negativa. Además, el edadismo está asociado con un mayor riesgo de enfermedades crónicas, deterioro funcional, hospitalizaciones frecuentes, aislamiento social y problemas de salud mental como la depresión.

Edadismo autoinfligido

Uno de los aspectos más dañinos del edadismo es el edadismo autoinfligido, que ocurre cuando las personas internalizan los estereotipos sobre la edad. Este fenómeno, que comienza a desarrollarse desde los cuatro años, lleva a que las personas mayores se limiten a sí mismas. Por ejemplo, pueden evitar participar en actividades sociales, asumir que ciertos problemas de salud son inevitables o dejar de aprender cosas nuevas.

Esta autoexclusión de las personas mayores tiene un impacto directo en la salud, ya que dejamos de esforzarnos por mantenernos activos y saludables porque asumimos que es una batalla perdida.

Manifestaciones del edadismo en la vida cotidiana

El edadismo se manifiesta en diversas áreas de la vida diaria:

• Lenguaje: Términos como "abuelito" o "viejito" pueden parecer inofensivos, pero despersonalizan y reducen la dignidad de las personas mayores.
• Empleo: Muchas empresas consideran que las personas mayores son menos productivas, lo que limita sus oportunidades laborales.
• Sanidad: Las necesidades médicas de las personas mayores a menudo son subestimadas o consideradas una consecuencia inevitable del envejecimiento.
• Educación: La falta de iniciativas intergeneracionales perpetúa los estereotipos y limita el aprendizaje mutuo entre generaciones.

La importancia de la educación y el cambio cultural contra el edadismo

Para combatir el edadismo, es fundamental implementar estrategias educativas desde edades tempranas. Iniciativas como visitas escolares a residencias, tutorías intergeneracionales y programas educativos que incluyan la temática del envejecimiento son esenciales para generar conciencia y cambiar actitudes.

En 2022, España aprobó una ley para la igualdad de trato y la no discriminación que, por primera vez, incluye la discriminación por edad. Sin embargo, esta normativa aún enfrenta desafíos en su aplicación, como la falta de una autoridad independiente que supervise su cumplimiento. Además, se necesita una Convención de Naciones Unidas que proteja específicamente los derechos de las personas mayores, algo que se lleva planteando desde 2010.

Cómo mantener el contacto con la sociedad

Un aspecto clave para contrarrestar los efectos del edadismo en las personas mayores es fomentar la participación activa de las personas mayores en la sociedad. Es importante crear campañas institucionales que promuevan estilos de vida activos y saludables en la vejez para que la jubilación no suponga u impacto negativo.

También existe el edadismo hacia los jóvenes

Aunque el edadismo afecta principalmente a las personas mayores, también tiene consecuencias en la población joven. También, los jóvenes se enfrentan barreras como la falta de acceso a empleos estables o el rechazo de sus ideas en entornos laborales, lo que afecta su desarrollo profesional y emocional. Sin embargo, este tipo de discriminación está menos documentado y visibilizado.

Cómo radicar el edadismo

Para eliminar el edadismo, es imprescindible trabajar en tres áreas clave:

1. Legislación: Promover leyes que prohíban la discriminación por edad y garanticen la igualdad de derechos.
2. Educación: Diseñar programas educativos que disipen conceptos erróneos sobre el envejecimiento.
3. Iniciativas intergeneracionales: Crear espacios donde personas de diferentes edades puedan interactuar y colaborar.

El edadismo es una forma de discriminación profundamente arraigada que afecta a personas de todas las edades. Reconocer el valor de las personas en todas las etapas de la vida no solo beneficia a los mayores, sino que construye una sociedad más inclusiva, justa y sostenible.

Bibliografía

• La discriminación por edad de las personas mayores
• El edadismo es un problema mundial - Naciones Unidas