Jubilación: la declaración de la renta de los jubilados

¿Los jubilados tienen que seguir haciendo la declaración de la renta? Sí. Al menos la mayoría de ellos. Una cosa es que termine tu vida laboral y otra cosa es que hayas terminado de ajustar cuentas con Hacienda, por eso los jubilados también están obligados a presentar la declaración todos los años y en el mismo plazo que los trabajadores en activos.

Algunos jubilados no tienen que hacer la declaración

Hablamos de plazos y concretamente este año 2021 la campaña de la Renta comienza el 7 de abril y termina el 30 de junio. Pero si te has jubilado hace poco, tus rentas pueden haber cambiado, por lo que quizás puedes estar exento de hacer la declaración este año. Si no estás seguro, lo mejor es consultar con una asesoría. Puedes incluso acudir a la propia Agencia Tributaria y ya sabes que hoy en día, a causa de la pandemia, debes pedir cita previa.

Como ya hemos mencionado, algunos jubilados están exentos de hacer la declaración de la renta, una declaración que no depende de la condición de trabajador en activo o pensionista, sino de los ingresos. Para empezar, si tu pensión de jubilación no supera los 22.000 euros al año, ya estás exento de presentar la declaración. Pero hay más excepciones a la hora de que Hacienda tenga en cuenta tus ingresos.

Algunos tipos de pensiones no tienen obligación de presentar la declaración de la renta, como la pensión de orfandad, las pensiones por invalidez absoluta, las pensiones derivadas de accidentes o las pensiones del extranjero que no superen los 1.500 euros. Y en este punto de las pensiones recibidas desde el extranjero, conviene consultar de nuevo con un experto para no tener malentendidos con Hacienda. Porque todo cuenta a la hora de hacer la declaración, no solo la cuantía de los ingresos individuales, sino también los del cónyuge.

Y atención también a otro tipo de rendimiento económico al margen de la pensión de jubilación, porque Hacienda sí quiere saber acerca de tus rendimientos de capital mobiliario o los intereses generados por depósitos o inversiones. Si esos rendimientos superan los 1.500 euros anuales, tendrás que presentar la declaración de la renta sea cual sea la cuantía de tu pensión de jubilación.