Biografía de Aristocles (seudónimo: Platón)

Platón nació en Atenas ?aunque algunos hablan de Egina?, en el seno de una familia aristocrática probablemente descendiente del célebre poeta, gobernante y legislador Solón. Los padres de Platón , Aristón y Perictione, tuvieron tres hijos más: dos varones, Adimanto y Glaucón, y una hija, Potone.

Huérfano de padre desde niño, Platón recibió educación del nuevo marido de su madre, Pirilampo, amigo de Pericles . Sin duda fue una formación acorde a la esperada para un joven de su posición. Pronto descubrió su vocación política, que le llevaría a escribir una de sus obras más importantes: La República .

Tras experimentar la dureza de la guerra y de la derrota en el Peloponeso, a los 20 años conoce a Sócrates , por quien desde el primer momento siente una ferviente admiración y a quien siempre consideraría su maestro.

En 399, muerto ya Sócrates , Platón se traslada a Megara, donde se encontraba la escuela socrática fundada por Euclides. Más adelante se trasladaría a Italia, donde trabaría amistad con el pitagórico Arquitas de Tarento.

Platón quiso poner en práctica sus ideas políticas en Siracusa (Sicilia), donde gobernaba el tirano Dionisio I, quien se sintió irritado por la franqueza de Platón y, al parecer, llegó a venderle como esclavo en Egina. Un ciudadano ateniense le rescató y así Platón pudo volver a Atenas, donde fundó la Academia (año 388-387), llamada así porque se ubicaba en las inmediaciones del santuario erigido en honor de Academos. Allí se enseñaban matemáticas, ciencias, astronomía, física y filosofía, y en ella estudió el gran Aristóteles. La Academia permaneció vigente hasta bien entrada nuestra era.

En el año 369 volvió a viajar a Siracusa para hacerse cargo de la educación de Dionisio II, hijo de Dionisio I. Pero esta experiencia no fue mejor que la anterior, aunque esta vez pudo huir a tiempo y refugiarse en Atenas. Aún efectuaría un tercer viaje a Siracusa, sin mejores resultados que los anteriores.

Regresó a Atenas en el año 360.

En sus últimas obras se refleja su pesimismo y decepción ante la condición humana. Al final de su vida se dedicó a enseñar en la Academia, hasta que murió a los 80 u 81 años de edad. Su legado filosófico es incalculable, desde su teoría del estado ideal (La República ), pasando por la psicología, el amor, la muerte, la cosmología, las matemáticas, etc., plasmados en sus famosos Diálogos (Fedón, Banquete, Fedro, Timeo, Teeteto...) .