Biografía de Édith Piaf

Cantante francesa, su voz y su extraordinaria personalidad la han convertido en un icono parisino y en el estandarte de la chanson. Algunos de sus temas, como La vie en rose o Je ne regrette rien, se han convertido en auténticos himnos universalmente conocidos.

Vida personal

Édith Giovanna Gassion nació en plena calle, bajo una farola de la rue de Belleville, en París. Su madre, que no podía hacerse cargo de ella, la dejó primero con su abuela materna y luego con su padre, quien había abandonado a ambas cuando la pequeña nació. El padre fue movilizado por la I Guerra Mundial y llevó a la niña a Normandía, con su abuela paterna, que regentaba un prostíbulo. Cuando terminó la guerra, su padre volvió del frente se hizo cargo de nuevo de ella. Vivían como artistas ambulantes y Édith empezó a demostrar su talento interpretando canciones populares por las calles.

A los 17 años tuvo una hija, Marcelle, que murió con 2 años, en 1935. Por esa época conoció a su descubridor, Louis Leplée, gerente de un cabaret de moda y que la presentó como la Môme Piaf (la niña gorrión).

Su vida sentimental fue turbulenta y trágica. El que fue su gran amor, el boxeador Marcel Cerdan, murió en 1948 en un accidente de aviación. Mantuvo multitud de romances, entre otros con Marlon Brando, Yves Montand, Charles Aznavour o Georges Moustaki.

Escribió una autobiografía llamada Au bal de la chance.

Trayectoria profesional

En 1936 firmó un contrato con Polydor y grabó su primer disco: Les Mômes de la cloche, ("Los niños mendigos", en argot). Inmediatamente se convirtió en un éxito. Pero la muerte violenta de su descubridor, Leplée, la arrastró al centro del escándalo y la devolvió a los pequeños cabarets. En ese momento, el compositor Raymond Asso se convirtió en su mentor y amante, y la preparó para ser una cantante profesional. No tardó en convertirla en una estrella.

En la década de 1950, Edith Piaf ya no era famosa solo en Francia, sino en muchos otros países. Su consagración internacional llegó en 1956, con sus actuaciones en el Carnegie Hall de Nueva York.

Pero su estado de salud se fue deteriorando progresivamente. En 1959 se desmayó en escena durante una gira en Nueva York y pasó por numerosas operaciones quirúrgicas. Volvió a París en muy mal estado de salud.

En 1961 ofreció una serie de conciertos en el Olympia de París. Era su local favorito y lo salvó del cierre. Fue su canto del cisne; apenas se tenía en pie y necesitó fuertes dosis de morfina para aguantar. Estrenó una de sus canciones emblemáticas, Non, je ne regrette rien (No me arrepiento de nada), compuesta para ella por Charles Dumont. Murió dos años después.

Algunas de sus canciones más célebres

* Mon légionnaire (1937)
* L´accordéoniste (1940)
* Les trois cloches (1946)
* La vie en rose (1946)
* Hymne à l´amour (1950)
* Padam... Padam... (1951)
* Mon manège à moi (1952)
* Sous le ciel de Paris (1954)
* La Foule (1957)
* Milord (1959)
* Non, je ne regrette rien (1960)