¿Cómo que una 'tarjeta de pago'?

Ya hace más de 60 años desde que llegó a nuestro país la primera tarjeta de crédito, entonces denominada "de pago", lo que significa que se hizo visible en España en 1954, exactamente cinco años después de su nacimiento en Estados Unidos. ¿Pero dónde estábamos la mayoría de los españoles que no nos enteramos de nada?

Por lo visto, se trataba de la Diners Club, una tarjeta de cartón a la que solo unos pocos privilegiados podían tener acceso -o sea, como casi siempre-, y que se parecía más a la de racionamiento, que poco tiempo antes había desaparecido, que a la que hoy día conocemos, que ya forma parte indivisible de nuestra vida cotidiana.

La tarjeta de plástico, un poco más parecida a la actual, se emitió por primera vez en 1961, aunque hasta 10 años después no adquirió cierta relevancia, como la emitida en 1971 por el BBVA, y que tuvo que esperar a los años 80 para que su uso fuese más extendido y habitual.

La mejor conclusión de todo esto es que, durante muchos años, nos apañábamos bien sin las dichosas tarjetas, con las que parece que compramos sin dinero. Antes, siempre pagábamos con dinero contante y sonante y, que yo recuerde, problemas no había ninguno. Si algo costaba 500 pesetas, pues ahí iban las 500 pesetas en billetes de 100 pesetas. Así de fácil. ¡Ah!, y se necesitábamos dinero, pues a la caja del banco más cercano con nuestra cartilla, en la que siempre llevábamos al día lo que entraba en casa y lo que salía, sin que faltara un solo céntimo.