La Noche de San Juan

En la noche del 23 al 24 de junio (o del 24 al 25, según localidad y tradición) se celebra en numerosas localidades españolas la Noche de San Juan, que, a pesar de su nombre (el día 24 es la festividad de san Juan Bautista), es una fiesta de origen pagano (aunque el componente religioso no se pierde en muchos sitios) que no se remonta demasiado en el tiempo, habida cuenta de esos largos periodos de censuras y recortes que hubo que soportar, y sortear. Lo que por lo general, salvo excepciones, se celebra esa mágica noche es el "solsticio de verano"; o sea, el día más largo del año, con el que se da la fogosa bienvenida a la llegada del verano, que no es tampoco mal asunto.

La verdad es que, desde hace ya unos cuantos años, en torno a esta festividad hay una enorme variedad de maneras de celebrarla, así como de fechas y extensión de las mismas. Si, por ejemplo, en la localidad granadina de Motril, la principal atracción ese día es la Fiesta del Agua y del Jamón, bastante suculenta por lo visto, en la riojana de San Juan de Nájera se mantiene la llamativa costumbre de las "Vueltas", que consiste en salir a la calle a cantar y bailar al compás de una charanga, para conmemorar el regreso de las tropas isabelinas después de su triunfo sobre las carlistas. En fin, cosas de este país tan ancho y diverso en todos los sentidos.

Pero en lo que casi por unanimidad se coincide es en lo de las hogueras, o, por lo menos, en la presencia del fuego, que siempre es símbolo de borrar los malos recuerdos y los sinsabores, para saludar la venida de un tiempo nuevo y mejor. Con esas, en algunos sitios, como Albacete, se queman los trastos antiguos; se espantan a brujas y meigas, como en Galicia; se rinde culto a xanes, trasgos o cuélebres, seres de la mitología asturiana; o se saltan hogueras y pisan cenizas aún candentes, como en Cantabria y tantos otros rincones de nuestra geografía.

Pero, sin duda, la Noche de San Juan más popular es la de Alicante, debido sobre todo a sus espectaculares Hogueras, o mejor dicho, Fogueres, bastante parecidas a las Fallas valencianas, que incluso han sido declaradas de Interés Turístico Internacional. Sin olvidar, claro, los desfiles y pasacalles, los fuegos artificiales, las ofrendas florales, la cremà... y los saltos de hogueras en la playa. Lo de las Fogueres, por cierto, no es exclusivo de Alicante capital, sino que también proliferan en otras localidades alicantinas, como en Javea, donde se celebran desde principios de los año 50 con parecido "ardor" y vistosidad.

Desde luego, con tantas y tan variadas celebraciones de San Juan, resulta difícil no rebobinar la memoria y encontrar un momento de nuestras vidas en el que disfrutamos de una mágica e inolvidable noche de junio.