Una vecina acoge en su casa a una mujer maltratada y a su bebé

La violencia doméstica no se ha detenido en este estado de alarma y la situación de las mujeres maltratadas se agrava al estar confinadas en casa con sus agresores. Y aunque el número de teléfono 016 que atiende los casos de violencia de género sigue en activo al igual que la policía y guardia civil, es cierto que en estos momentos las mujeres maltratadas pueden no encontrar la rápida respuesta que necesitan. Y cuando todo falla, los vecinos pueden llegar a ser auténticos héroes.

Una vecina de Vigo acoge a una mujer maltratada

Nuestra heroína particular se llama Olivia López, una empleada de hogar de 38 años con tres hijos y que vive en Vigo. Olivia no dudó ni un segundo cuando desde la Federación de Vecinos Eduardo Chao le comentaron el caso de una mujer con un bebé de un año que estaba pasando el confinamiento con su agresor. Sin familiares, sin apoyos cercanos y sin trabajo, la situación que estaba atravesando esta mujer maltratada era dramática.

La mujer estaba sufriendo malos tratos físicos y psicológicos y se puso en contacto con los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Vigo. Pero ante la falta de recursos municipales, encontró una mano tendida en la Federación de Vecinos de Eduardo Chao. Allí la acompañaron a poner la denuncia a su agresor y buscaron una solución a su delicada situación para que no tuviera que volver al mismo domicilio.

Olivia López le ofreció su casa para pasar el confinamiento con ella y con sus tres hijos. Llevan ya dos semanas conviviendo y son como una familia. Cuatro niños y dos madres que representan la cara más amable de esta crisis sanitaria que estamos viviendo. Y que nos da esperanza porque allá donde no llegan los recursos institucionales, llega la solidaridad vecinal.

Mujeres como Olivia nos dan la clave para superar los peores momentos de esta pandemia. Cuando se le pregunta por qué acogió en su casa a la joven maltratada cuenta que aunque nunca ha sufrido malos tratos, sí ha vivido momentos difíciles en su vida y otras personas la han ayudado. Ahora era ella la que estaba en disposición de ayudar y no tenía ninguna duda de qué había que hacer.