Reciclar el móvil, una contribución al medio ambiente

Dicen las estadísticas que cada año y medio los españoles cambiamos de teléfono móvil, bien porque está deteriorado, por aprovechar una oferta o por el dictado de la moda o por estar al tanto de los últimos avances tecnológicos del mercado.

¿Qué hacer con el aparato desechado?

Desde luego, reciclarlo. Tras la pequeña carcasa, se esconden multitud de metales tóxicos que, de acabar en el vertedero o en la incineradora, serían capaces de degradar el medio ambiente y de ocasionar graves problemas de salud en los organismos vivos. Y, sin embargo, estos terminales telefónicos y sus accesorios están fabricados con materias primas escasas -como el hierro y el cobre, o el oro y la plata en pequeñas cantidades, la fibra de vidrio o el vidrio y los plásticos- que pueden reutilizarse para la fabricación de nuevos aparatos.

Además de los más de 500 contenedores existentes en nuestro país para el reciclaje -en los puntos limpios municipales, en tiendas de operadores telefónicos o en los propios servicios técnicos-, son muchas las iniciativas que se han sumado para la recogida de los aparatos. Las asociaciones de fabricantes, las propias empresas comercializadoras de la telefonía móvil y hasta las organizaciones no gubernamentales han puesto en marcha campañas de reciclado con el objetivo de recuperar de nuestras bolsas de basura y de nuestros cajones los miles de terminales que, entre todos, acumulamos en nuestras casas.

La iniciativa Tragamóvil, por ejemplo, comenzó el año 2001, impulsada por ASIMELEC, Asociación Multisectorial de Empresas Españolas de Electrónica y Comunicaciones, en el seno de la Comisión de Telefonía Móvil, con el objetivo de ofrecer una solución eficaz al problema de la creciente generación de los residuos derivados del final de la vida útil de los teléfonos móviles y de sus accesorios.

Esta iniciativa, cofinanciada por la Comisión Europea, ha conseguido recoger en su autobús -el tragamóvil- varias toneladas de aparatos durante 2007, la mayoría de los cuales, en perfecto funcionamiento, han sido enviados a países del tercer mundo. El resto se lleva a una planta de reciclado, en la que se aprovechará hasta el 90% de sus componentes.

Por su parte, Cruz Roja Española y Entreculturas, dispone del programa Dona tu móvil, que facilita gratuitamente bolsas franqueadas para depositar los móviles viejos en cualquier buzón de correos. Los fondos que se obtienen de la reventa o el reciclado de los terminales se destinan a proyectos humanitarios y medioambientales. Además de las bolsas, existen contenedores en centros comerciales, oficinas bancarias, hoteles, universidades y otras empresas e instituciones. Solo en el último año, se han recogido más de 120 600 móviles.