Bullmastiff

Descripción
El Bullmastiff es un perro fuerte, sociable y compacto aunque no da sensación de pesadez. Cuando está alerta arruga el cráneo, el cual es grande y curvo, tiene hocico corto y bien marcado. Su nariz es ancha y plana. Tiene ojos de color avellana oscuro. Sus orejas son altas y cuelgan levemente. Su pelaje es corto y denso y puede ser de cualquier tono leonado o de rojo, estriado o no.

Origen
En el transcurso del siglo XIX algunos criadores se dedicaron a buscar un perro tan temible como el Mastín inglés (Mastiff), pero más ágil y combativo, con el fin de defender las haciendas de los grandes propietarios. Para ello cruzaron Bulldogs ingleses con estos mastines ingleses, obteniendo así al Bullmastiff tal como es hoy. Se puede hablar de una cría de razas puras a partir de 1924.

Altura/peso
Machos: de 63 a 69 centímetros de altura y 50 a 59 kilogramos de peso.
Hembras: centímetros y 40 a 50 kilos.

Temperamento
Es un perro inteligente, valiente, fiel, sociable, obediente y amistoso, aunque requiere cierta autoridad en su educación. Es muy juguetón con los niños y protector con la familia.

Compañero Ideal
El Bullmastiff necesita de espacio para quemar energías. Debido a su carácter no está recomendado para dueños inexpertos ya que requiere de atención y severidad. Si educamos bien a nuestro ejemplar estaremos ante un perro socible y fiel.

Problemas de salud
Esta raza es fuerte y saludable, pero puede padecer enfermedades comunes como artritis, problemas de ligamentos, displasia de cadera y de codo, hiperplasia y callosidades.

Cuidados
Pese a su aspecto compacto, el Bullmastiff es una raza ágil que requiere mucho ejercicio y una disciplina firme y constante. Debe indicársele su puesto en la familia y enseñarle a mantenerse en él. Su pelo denso y corto precisa un aseo mínimo.

Esperanza de vida
De 11 a 12 años

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