Galgo Escocés

El Deerhound Escocés, o Galgo Escocés, es ante todo un perro de cacería. Su desarrollada visión es empleada primero para localizar la presa en la distancia, y después para perseguirla. Históricamente esta raza se utilizaba para la caza de grandes venados, lo que le permitió alcanzar una gran fama y ser, aún a día de hoy, uno de los perros favoritos de los escoceses.

Su esbelta figura está cubierta de un pelaje mucho más largo que los otros galgos, lo que responde a la necesidad de adaptarse a un clima tan frío como lo es el de las montañaz escocesas.
Aunque el Galgo Escocés se comporta como una formidable mascota, como siempre decimos sus genes le obligan a gastar una cantidad de energía diaria que deberá ser suministrada por nosotros a base de largos paseos y caminatas. Su relación con otros perros y mascotas puede no ser muy buena.

Origen:

El Deerhound tiene sus orígenes en Escocia, donde se estima aterrizó de la mano de los fenicios hace más de tres mil años. Algunas otras opiniones sugieren que es posible que descienda de perros celtas llevados a las islas desde el año 279 a.C., hipótesis esta que sostiene que sus antepasados podrían ser los mismos que los del Wolfhound Irlandés.

Tamaño:

De 71 a 80 cm de altura.

Peso:

Entre 34 y 48 kg.