Terrier Brasileño

Siempre en movimiento, alerta, activo y sagaz. Así es el carácter del Terrier Brasileño, excelente como mascota, hábil en la caza de pequeños roedores e incluso buen guardián. De tamaño medio, esbelto y con una estructura equilibrada, muestra una apariencia cuadrada con líneas curvas bien definidas, aspecto este que lo distingue claramente de su pariente el Fox Terrier de pelo liso.

Ante todo, se trata de un perro alegre y lleno de energía. Su agilidad e inteligencia hacen de él un animal relativamente fácil de adiestrar, y prueba de ello es su omnipresencia en las presentaciones caninas a lo largo del mundo. De temperamento manso con la familia, acostumbran a extrañar a ser cautos con los desconocidos y son un poco territoriales.

Origen:

Aunque su nombre puede dar lugar a confusiones, lo cierto es que los antepasados del Terrier Brasileño no se encuentran en Brasil. Los auténticos responsables del origen de esta raza fueron los jóvenes brasileños que estudiaban en universidades europeas a finales del siglo XIX, especialmente en Francia e Inglaterra. Al regresar a su país, estos jóvenes volvían muchas veces casados, y sus esposas traían con ellas un pequeño perro tipo Terrier.
Estos pequeños perros se adaptaron a la vida brasileña y se comenzaron a aparear con ejemplares locales. Así, al cabo de unas pocas generaciones el fenotipo quedó establecido, surgiendo el estandar de la raza.

Tamaño:

De 33 a 40 cm.

Peso:

Llegan a alcanzar como peso máximo los 10 kg.