'Delacroix (1798-1863)'. Caixaforum Madrid

Eugène Delacroix cuestionó la necesidad del tema en la pintura. Según él, lo que provocaba emoción en un lienzo eran sus valores plásticos -materia, luz, color-, más allá de las escenas que se representan. Dar a conocer esta nueva imagen de Delacroix, alejada de su asociación con las grandes composiciones de tema histórico, como un revolucionario enfrentado a las convenciones del arte neoclásico, es uno de los objetivos de esta retrospectiva organizada por la Obra Social "la Caixa" y el Museo del Louvre.

La muestra reúne más de 130 obras procedentes de colecciones públicas y privadas de Europa y América, que permiten reconstruir la evolución del artista, desde sus inicios, cuando buscaba la inspiración en creaciones artísticas y textos literarios, hasta la etapa final, marcada por la síntesis del conjunto de su obra.

Uno de los atractivos de la exposición es poder contemplar obras que se han convertido en referentes de nuestra cultura visual. Por otra parte, junto a los óleos de gran formato, se exponen bocetos, dibujos, acuarelas y grabados que ofrecen un testimonio de la vida interior del artista y lo aproximan a la sensibilidad contemporánea. La muestra también ahonda en el vínculo de Delacroix con España.

En paralelo a la exposición, CaixaForum ha organizado un programa de actividades que incluye un ciclo de conferencias, otro de conciertos, visitas comentadas y un café-tertulia para personas mayores.

Imagen: El naufragio de Don Juan. Eugène Delacroix, 1840. Musée du Louve. © 2009 Musée du Louvre / Erich Lessing.