Ortiga

Pocas plantas tienen una lista tan larga de propiedades medicinales como con la que cuenta la ortiga.

Resulta excelente para el aparato digestivo, ya que protege el hígado y favorece la función biliar, ayuda a la digestión y favorece el transito intestinal.

La ortiga también tiene unos demostrados efectos hemostáticos y, por tanto, detiene las hemorragias, y sus propiedades para mejorar la circulación sanguínea son estupendas para tratar la arterioesclerosis.

Es un buen antidiabético, pero también se usa como diurético. Su capacidad para eliminar los líquidos lo hacen muy recomendable para cuidar el riñón, y en casos de gota, artritis o artrosis. También es recomendable para luchar contra la anemia, debido a su alto contenido en hierro.

Igualmente, es muy recomendable para el cuidado de la piel (granos, herpes, acné, eczemas...) y como regenerador capilar, ya que combate caspa, seborrea y otras alteraciones relacionadas con la caída del cabello.