Glucosamina

¿Qué es?

La glucosamina es una sustancia natural existente en nuestro organismo que interviene en la síntesis de los proteoglicanos. Los proteoglicanos son sustancias formadas por azúcares y proteínas que forman parte de los cartílagos. Además la glucosamina impide que determinadas sustancias del organismo llamadas enzimas, destruyan los cartílagos.
Por este motivo, la glucosamina se administra en algunos pacientes con artrosis, en los cuales se produce una degeneración de los cartílagos.

¿Para qué se utiliza?

Artrosis.

¿Cómo se utiliza?

En España glucosamina existe comercializada para su administración oral en forma de sobres. La dosis adecuada de glucosamina puede ser diferente para cada paciente. A continuación se indican las dosis más frecuentemente recomendadas. Pero si su médico le ha indicado otra dosis distinta, no la cambie sin consultar con él o con su farmacéutico. Dosis oral en adultos: 1,5 g (1 sobre) al día.

No se recomienda el uso de glucosamina en niños. Se recomienda tomar la glucosamina inmediatamente antes de las comidas, disolviendo el sobre en medio vaso de agua.

¿Qué precauciones deben tenerse?

Es importante respetar el horario pautado. Si se le olvida tomar una dosis tómela tan pronto como sea posible y vuelva a la pauta habitual. Pero si falta poco tiempo para la próxima dosis no la duplique y continúe tomando el medicamento como se le había indicado.
Las especialidades farmacéuticas de glucosamina contienen aspartamo como excipiente, por lo que deberán tomarlo con precaución las personas afectadas de fenilcetonuria.
Los sobres de glucosamina también contiene sorbitol como excipiente por lo que puede causar molestias de estómago y diarrea y no deberá ser utilizado en pacientes con intolerancia hereditaria a la fructosa.
La glucosamina debe administrarse con precaución en pacientes con diabetes.
Si los síntomas no mejoran o empeoran visite a su médico.

¿Cuándo no debe utilizarse?

En caso de alergia a glucosamina. Si experimenta algún tipo de reacción alérgica deje de tomar el medicamento y avise a su médico o farmacéutico inmediatamente.

¿Puede afectar a otros medicamentos?

Algunos medicamentos que interaccionan con la glucosamina son los siguientes: anticoagulantes orales, (acenocumarol, warfarina), antihipertensivos (captoprilo, lisinoprilo), metotrexato, sales de litio, antibióticos del grupo de las tetraciclinas, penicilinas y cloranfenicol.
Informe a su médico o farmacéutico de cualquier otro medicamento que esté tomando.

¿Qué problemas pueden producirse con su empleo?

Los efectos adversos de este medicamento son poco frecuentes, leves y transitorios. Raramente puede ocasionar nauseas, dolor abdominal, gases, estreñimiento o diarrea, somnolencia, mareo y dolor de cabeza.
Raramente puede producir otros efectos adversos. Consulte a su médico si advierte algo anormal.

¿Puede utilizarse durante el embarazo o la lactancia?

No se han realizado estudios adecuados sobre la administración de glucosamina en mujeres embarazadas. Por ello, el uso de este medicamento sólo se acepta en el caso de que no existan otras alternativas de tratamiento más seguras.
No se conoce si la glucosamina pasa a la leche materna en cantidades significativas ni el efecto que podría tener en el lactante. Consulte a su médico si debe continuar el tratamiento durante la lactancia.

¿Necesita receta médica?

Sí.

¿Cómo se conserva?

Mantener el medicamento en un lugar fresco, sin humedad, lejos de fuentes de calor y luz directa.
No dejar al alcance de los niños.

Nombres comerciales en España de algunos medicamentos que contienen sólo glucosamina:

Cartisorb®, Hespercorbin®, Xicil®.

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