¿Cómo se produce la cirrosis del hígado?

El hígado es un órgano ubicado en el cuadrante superior derecho del abdomen y forma parte del aparato digestivo. Desempeña diversas funciones vitales: procesa los nutrientes, produce proteínas, almacena azúcar o glucógeno, y también regula los niveles hormonales del cuerpo, el nivel de azúcar en sangre, el nivel de colesterol y la retención de líquidos. El hígado filtra las sustancias no deseadas y ayuda al cuerpo a combatir las infecciones.

La cirrosis es una enfermedad hepática progresiva y crónica, que impide que el hígado funcione normalmente. Con más frecuencia, la causa de esta enfermedad es el alcoholismo crónico, pero también puede originarse por la hepatitis y otras enfermedades.

El daño hepático (en el hígado) causado por el alcoholismo u otras enfermedades forma tejido cicatrizal en el tejido hepático sano. Estas cicatrices impiden que la sangre circule a través del hígado, por lo que éste no puede funcionar adecuadamente. Si la causa subyacente de la cirrosis persiste, por ejemplo, si una persona con problemas de alcoholismo sigue bebiendo alcohol, la cirrosis avanzará y la función hepática se deteriorará. Aun cuando la causa de la cirrosis se haya corregido, no es posible reparar ni revertir el daño hepático.