Trucos de la abuela para limpiar la vitrocerámica

La vitrocerámica, por su elegante apariencia y fácil mantenimiento, se ha convertido en una opción popular en muchas cocinas. Sin embargo, su superficie brillante puede ser propensa a manchas y residuos difíciles de limpiar.

Mantenerla impecable no tiene por qué ser una tarea ardua si conoces los trucos adecuados. Hay que tener mucho cuidado a la hora de limpiar una placa de vitrocerámica, ya que, además de su fácil rayado, hacerlo con un producto inadecuado podría dañarla irreparablemente.

En Plusesmas.com te presentamos 13 trucos de la abuela caseros para dejar tu vitrocerámica reluciente.

Trucos para limpiar la vitrocerámica sin rayarla

Es importante que utilices el truco de la abuela que utilices, nunca uses un estropajo o cualquier tipo de trapo de superficie dura que pueda rayar la superficie.

1. Vinagre blanco

El vinagre es un aliado poderoso para limpiar. Mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua en un pulverizador, rocía sobre la superficie y deja actuar unos minutos. Limpia con un paño suave.

2. Bicarbonato de sodio

Haz una pasta con bicarbonato y agua, aplícala sobre las manchas difíciles y deja reposar durante 15 minutos. Luego, frota suavemente con un paño húmedo y retira los residuos.

Es importante que disuelvas bien el bicarbonato, ya que sus gránulos pueden rayar la superficie de la vitrocerámica. Usa este truco casero sólo de vez en cuando para que tu placa vitrocerámica no sufra.

3. Limón

El ácido cítrico del limón es ideal para disolver grasa. Exprime un limón sobre la superficie, y frota con un paño. Recuerda, nunca utilices un estropajo. Enjuaga y seca para obtener un brillo reluciente.

4. Agua y jabón

El método tradicional con agua tibia y jabón suave es efectivo para la limpieza diaria. El jabón que utilizas para la vajilla puede ser perfecto también para limpiar la vitrocerámica. Aplica el jabón sobre la superficie y frota suavemente con un paño húmedo.

5. Cuchilla de afeitar

Con cuidado, usa una cuchilla de afeitar para eliminar restos de comida quemada. Asegúrate de mantener la hoja plana para evitar rayar la superficie. Puedes añadir como producto de limpieza algunos de los trucos anteriores para suavizar el paso de la cuchilla por la superficie de la placa. Mira entre las instrucciones de la vitrocerámica, ya que muchos fabricantes ya incluyen la cuchilla como un complemento cuando te compras la placa.

6. Alcohol

El alcohol desnaturalizado es útil para eliminar manchas persistentes. El alcohol es especialmente útil si tienes algunas manchas de pegamento en tu vitrocerámica. Humedece un paño con alcohol y frótalo sobre la zona sucia con un trapo limpio y suave.

7. Pasta de dientes

La pasta de dientes no solo es para cepillarse los dientes. Aplica una pequeña cantidad sobre las manchas rebeldes, frota con suavidad y enjuaga con agua. La consistencia cremosa de la pasta de diente es perfecta para usarla en conjunto con la cuchilla.

8. Aceite de oliva

Aunque en la mayoría de casos lo que queremos es eliminar la grasa de la placa, si queremos que la placa brille, después de su limpieza a fondo, puedes aplicar unas gotas de aceite de oliva sobre la superficie y frótala con un paño limpio para darle brillo y protección.

9. Amoniaco

Particularmente a mí no me gusta el uso del amoniaco por el olor que desprende, sin embargo, hay que reconocer que es un potente desincrustante de la suciedad. Si no te resulta muy desagradable su olor, puedes mezclar una pequeña cantidad de amoniaco con agua y aplícala sobre la vitrocerámica. Deja actuar unos minutos antes de limpiar con un paño húmedo. Limpia bien los restos para eliminar el olor.

10. Vapor para desincrustar

Calienta la placa de cocción levemente y coloca un trapo húmedo sobre las manchas. El vapor ayudará a aflojar los residuos, facilitando su limpieza. Es importante que tengas cuidado a la hora de calentar el trapo porque puede llegar a quemarse, resultando peligroso.

11. Vinagre y bicarbonato de sodio

Combina vinagre y bicarbonato para crear una reacción efervescente y altamente eficaz contra las manchas. Extiende esta mezcla sobre la superficie, frota y luego limpia con un paño húmedo. Al igual que en el anterior truco con bicarbonato, ten cuidado ya que el bicarbonato mal disuelto puede rayar la superficie de la vitrocerámica.

12. Agua caliente

El agua caliente es un truco casero muy eficaz, sin añadir sustancias químicas, para eliminar los restos de comida pegados en la vitrocerámica. Cubre la superficie con un paño empapado en agua caliente durante unos minutos. Esto aflojará la suciedad incrustada, facilitando su eliminación.

13. Removedor de esmalte de uñas

La acetona que utilizamos para quitarnos el esmalte de las uñas puede resultar efectivo contra manchas rebeldes, así como algunos restos de pegamento o pintura. Aplica una pequeña cantidad en un trapo húmedo y limpia la vitrocerámica con él suavemente.

Recuerda siempre probar cualquier método en una pequeña área discreta antes de aplicarlo en toda la superficie de la vitrocerámica. Con estos trucos caseros para limpiar la vitrocerámica, podrás mantener tu placa impecable, prolongando su vida útil y disfrutando de una cocina reluciente.

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