5 consejos imprescindibles para unas uñas de manos y pies sanas y bonitas

Uñas quebradizas, que se agrietan o se enquistan, durezas, pellejos, cutículas... el quehacer diario supone un desgaste importante para la salud de nuestras uñas. Por suerte, basta con seguir unas sencillas recomendaciones para que su cuidado diario nos mantenga a salvo de estas molestias. Y es que mantener las uñas en perfecto estado nos va a ayudar a sentirnos mejor con nosotras mismas, ya que no debemos olvidar que son una señal externa de ciertos indicadores de nuestro cuerpo.

Por ejemplo, si están quebradizas, puede ser una señal de falta de vitaminas o incluso de un problema de hígado. Aunque, por supuesto, son también un aspecto más de la personalidad de cada uno. Así que, por uno u otro motivo, cuidar las uñas es muy aconsejable, y basta con seguir estas recomendaciones que pueden llevarse a cabo en casa.

5 pasos para unas uñas perfectas

• Cortar y limar. Lo ideal es hacerlo una vez a la semana y con las manos secas, porque si lo hacemos en mojado pueden astillarse las uñas. Hay que aprovechar para masajear la zona, así facilitamos la circulación y la llegada de nutrientes.
• Cuidado de las cutículas. Tienen como función ser una barrera natural, protegiendo el hueco que queda entre la uña y el dedo. Por tanto, no se puede quitar en su totalidad. Es suficiente con empujarlas hacia atrás, preferentemente una vez a la semana. Si se levanta la podemos retirar, porque es piel muerta.
• Pulido. Por lo general, sólo es necesario para las uñas que se descaman. Conseguimos dejar una capa lisa y brillante en la superficie que actúa como un sellado de la uña, evitando su deshidratación. Eso sí, es necesario hacerlo con mucho cuidado, ya que el efecto del pulidor es reducir el grosor de la uña.
• Mascarillas y aceites. Podemos emplear estos productos para nutrir e hidratar las uñas. Si nuestras uñas son especialmente quebradizas habrá que hacerlo todos los días, aplicándolos mientras realizamos un masaje suave de toda la zona.
• Esmalte. Como último tratamiento, ayuda a proteger las uñas, pero hay que renovarlo cada semana, ya que también tiende a secarlas y puede volverlas quebradizas. Así, conviene aplicar primero una base hidratante o blanqueadora. Un buen esmalte ofrece más ventajas que inconvenientes; algunos tipos son más duraderos, con un acabado de gel, pero no sellan tanto como las uñas postizas.

Dejadme que en otra ocasión os hable más detenidamente de problemas concretos, como morderse las uñas. Pueden solucionarse, pero en estos casos una ayuda más profesional se hace casi imprescindible.

Maribel Corpa, experta en bienestar y belleza y cofundadora de la cadena Templo del Masaje